¿Y si fuera cierto?

¡Oohhh! Hace más de un año que no voy al cine. Me cuesta ver películas en la tele y  descarto absolutamente la opción de ver una por el computador porque me mareo, me desconcentro, y no pertenezco a esa generación. Además me encantan las salas de cine: las butacas son tan cómodas, la temperatura es siempre la ideal, y esa oscuridad siempre es rica. Sobretodo si vas con alguien que te gusta. Y para qué decir la pantalla gigante y los efectos de sonido de la sala… maravilloso.

Mi problema es que me “engrupo” demasiado con la trama de las películas, y quiero creer que no soy la única a quien le pasa.

¿O acaso a nadie más le dieron ganas de robar luego de ver Ocean’s Eleven? Es cosa de preguntarle a los que robaron del aeropuerto el camión de Brinks. ¡Esos se dieron una sobredosis de “La gran estafa”!

O cuando veo Kill Bill. ¡Qué manera de querer sacarle la chucha a todos! Me la sé de memoria, me encantaría ser Beatrix Kiddo y cortar un par de cabezas con mi Hattori Hanzo.

Las películas basadas en hechos de la vida real son mis favoritas, pero hay algunas fantásticas que más que gustarme, me encantaría que se hicieran realidad.

¿Se imaginan ordenar con un solo chispeo de dedos la cagá que queda post carrete en la casa, a lo Mary Poppins? Qué hermoso. Te llama el conserje, “señorita, están acá sus papás, van subiendo a su departamento” ¡Mierda! Está todo lleno de humo aún, hay botellas en todas partes, la cortina rajada, la alfombra manchada con alcohol, un par de weones empelota, y tú con cara de culo. Pero “sacatrás”, chispeaste los dedos y la cagá producto de Sodoma y Gomorra se transforma en casa piloto y del olor a piscola ni rastros.

Entran tus viejos con el ánimo de pillarte y ven a su hija estudiando con dos compañeros -que obviamente eran los que estaban empelota y que producto de la magia se transformaron en estudiantes ejemplares- y el departamento llega a brillar. ¡¡¡Supercalifragilisticoespialidoso!!! 

O que pudiésemos tener el poder de Mel Gibson (alarma de viejo rico), y adivinar lo que piensa el resto de las mujeres como en Lo que ellas quieren. Y aclaro, que el poder específico sea adivinar lo que piensan las mujeres, porque los hombres son tan evidentes, que saber qué piensan ellos es fácil.

Tu jefa te llama a una reunión para cagarte controlando tu trabajo, y ¡pum! Le dices lo que ella quiere escuchar. Te salvaste. O corroboras que efectivamente ese par de weonas te está pelando y decirles en su cara “sé lo que están pensando de mí, par de maracas”

Y les tengo una súper película a todas las mamás normales que me leen ( las súper mamás me van a criticar por desgraciada tal vez, pero me da igual, porque me caen pésimo y no les creo nada). ¿No creen que si Toy Story fuera real, todo sería mejor? ¡Tus hijos se entretendrían solos! Cuando ya una está pa’ la cagá después de llegar de la pega, ir al super, al gimnasio, ordenar la casa y jugar con tu hijo, traspasas la pega de la siguiente manera:  «Woody! Buzz! ¿Pueden jugar un ratito con el Rai mientras me cambio de ropa y reviso un par de correos?”

¡Qué lindo! A parte creo que si los juguetes vivieran sería estupendo -salvo Chucky, obvio- porque nunca se perderían, volverían solos a la cajita y no tendríamos que andar en cuatro patas buscando al “Pocoyo” debajo de los sillones, mesas, etc.

¿Y qué me dicen de Amor Ciego (la película si po, no el reality más irreal de la historia de Canal 13). Acá Gwyneth Paltrow es una gorda de esas que se ven pocas veces fuera de Estados Unidos, pero su mino, Jack Black, cree que es la mujer más rica del mundo.

¡Sería la raja que a uno la vieran como una modelo, independiente que seas media lechona o de frentón “mal amarraita”! Y mejor aún sería, que sólo tú vieras estupendo a tu mino, para que ninguna desgraciada te lo joteara, y para que el individuo no se crea mijito rico y ande coqueteando por ahí con compañeras de universidad, o haciéndose el lindo en el gimnasio.

Otra cosa maravillosa sería poder evitar que los papás de tus ex se conocieran, o que por lo menos el ex suegro se hubiera puesto un condón para evitar el nacimiento del pelotas, usando el auto de Volver al Futuro. ¡Yo enmendaría tanto error! Partiendo por haber sido menos floja en el colegio, habiendo elegido otra carrera, y haber sido más ahorrativa con las lucas.

Algo similar ocurriría si tuviéramos ese bendito control remoto de Click. No tuvo mejor herramienta Adam Sandler que apretar “rewind” para cachar cuál era la famosa canción que sonaba cuando conoció o se declaró a su esposa. Hombres de mierda, ¡¿cómo te olvidas de Linger?!

Yo ocuparía el mute. Es el mejor botón del control remoto. Porque si bien sería más sano apretar off y apagar a esa neurótica que en la oficina chilla todo el día, es más entretenido verla gesticular sobreactuadamente sin escuchar esa vocecilla enfermante.

Ahora imaginen, llegas a tu casa después de la pega, que queda a muchos kilómetros y horas de taco, y te das cuenta que se te quedaron las llaves. Ctm… No tengo otras. Vivo sola. Se pone a llover. Filo, proyecto en el cielo un holograma..¡Batman anda a buscarme las weas de llaves porfa y pasa a comprar unas chelas, que total el Batimóvil es amplio!

Tienes cualquier problema, no cuentas con nadie para solucionarte nada… murciélago en las alturas, y Batman va a mamarse la reunión de apoderados y tú te vai a tomar una cosita con tus amigas. Sin abusar obvio, pero para los casos de emergencia.

Y por último, la solución para esas veces en que tienes que salir de la casa, ya sea porque te vas de vacaciones, o porque quieres o tienes que salir con tus 4 críos, más el inútil de tu marido, y todos gritan, nadie coopera, estás apurada, aprietas un gatillo y… Querida Encogí a los Niños. Te ahorras espacio, escuchar quejidos, entre otros. Yo le cambiaría el nombre. Onda «Encogí a todos los Weones un rato»

Llegas a un concierto y te toca el infeliz más cabezón del estadio delante de ti. ¡Pum! Encogido. Fila del banco, mil weones antes que tú.  ¡Chao! Encogidos los mierdas. Una tipa llega a la fiesta con tu mismo vestido y se ve mejor…encogida.

Seguro hay muchas películas más que podrían servirnos de mucho para facilitar nuestra vida.

Me propusieron que incluyera Todopoderoso, pero ya vimos que ser Dios es una mierda. Todos pidiéndote milagros y descansando en ti (en Él). Confiando siempre en que Él te va a salvar, aunque seas una porquería de ser humano. No puedes equivocarte acercándole la luna a nadie en una noche romántica, porque queda la cagá con los fenómenos naturales. Así que descartada. Además, Morgan Freeman es Dios. No hubo casting alguno.